miércoles, 12 de septiembre de 2012

Hermosillo y su presa un poco llena...

Algo muy gracioso de este día fue, que me tocó la suerte de que el tren estaba a punto de pasar, así que dije y le dije a mis papás "Me voy a aventar una foto bien chingona del tren". Desde que estaba a lo lejos me me preparé para poderlo captar lo más cerca posible, preparé mi cámara y todo y me puse. Esperé y esperé. Era cuestión de segundos para sacar la foto, estaba a punto de aplastarlo por completo para tomar la foto cuando "PIIIIIP, PIIIIIIP" Maldito señor del tren pitó justo cuando iba a tomar la foto, me asuste y di un brincote y no pude tomar la foto. Así es como un tren y su conductor me arruinaron mi foto.

 Mi bolito (Así le digo a mi papá)
Se paraba viendo todo verde, como si recordara cuando estaba más pequeño, cuando todo estaba vacio, cuando la presa estaba tan llena que se desbordaba. Recordaba como muchas veces cuando era joven, caminó desde muy lejos hasta la presa, y como se le hacía eterno porque no había nada que ver y con que entretenerse y como era antes y como era todo ahora, era algo que se le notaba en la manera en la que miraba a su alrededor callado.
Él era el que me decía "¿Ya le tomaste foto a eso? ¿Ya le tomaste foto a aquello?"


No hay comentarios:

Publicar un comentario